Qué cosas
Principio:
El día había no había sido bueno, pero tampoco había sido malo, nada especial le había pasado, un día digno de olvidar. Llegó a casa, dio de comer a su gato y se acostó pronto, sorprendentemente se durmió a los pocos minutos. Despertó de madrugada. Primero abrió los ojos en la oscuridad y estuvo escuchando un rato el zumbido de sus oídos. Ya no tenía sueño. Después alargó la mano y accionó el interruptor de la lámpara de su mesita de noche. Le desconcertó la luz. Su gato seguía durmiendo, un borracho cantaba en la calle. No pensó en nada. Finalmente se incorporó y se quedó sentado al borde de la cama. Su almohada se desdobló lentamente. La miró; le recordó a un cadáver. Lloró. Y todo empezó esa noche.
Final:
La noche no había sido buena, pero tampoco había sido mala, nada especial le había pasado. Al salir del último bar, en el que se había quedado solo, observó la belleza de los colores muertos del amanecer, algunas palomas madrugadoras alzaron el vuelo a su paso. Estaba empezando a lloviznar pero no aceleró el paso. Cuando llegó a casa cerró todas las contraventanas, se tomó un lexatín. Cerró los ojos, pensó en la vida que se va, en la muerte.Después se durmió y no soñó con nada.
Asi que:
Creo que me voy a tirar un mínimo de un año para averiguar lo que pasó entre estos dos parrafos que un Dios obsesivo me dictó anoche antes de dormir.Desearme suerte
El día había no había sido bueno, pero tampoco había sido malo, nada especial le había pasado, un día digno de olvidar. Llegó a casa, dio de comer a su gato y se acostó pronto, sorprendentemente se durmió a los pocos minutos. Despertó de madrugada. Primero abrió los ojos en la oscuridad y estuvo escuchando un rato el zumbido de sus oídos. Ya no tenía sueño. Después alargó la mano y accionó el interruptor de la lámpara de su mesita de noche. Le desconcertó la luz. Su gato seguía durmiendo, un borracho cantaba en la calle. No pensó en nada. Finalmente se incorporó y se quedó sentado al borde de la cama. Su almohada se desdobló lentamente. La miró; le recordó a un cadáver. Lloró. Y todo empezó esa noche.
Final:
La noche no había sido buena, pero tampoco había sido mala, nada especial le había pasado. Al salir del último bar, en el que se había quedado solo, observó la belleza de los colores muertos del amanecer, algunas palomas madrugadoras alzaron el vuelo a su paso. Estaba empezando a lloviznar pero no aceleró el paso. Cuando llegó a casa cerró todas las contraventanas, se tomó un lexatín. Cerró los ojos, pensó en la vida que se va, en la muerte.Después se durmió y no soñó con nada.
Asi que:
Creo que me voy a tirar un mínimo de un año para averiguar lo que pasó entre estos dos parrafos que un Dios obsesivo me dictó anoche antes de dormir.Desearme suerte
9 comentarios
Tristán Fagot -
Calavera de la Reina -
Tristán Fagot -
En cuanto a los demás...no me había propuesto hacer realidad este mini-cuento, pero me aburro mucho y quizás me ponga, viendo las muestras de apollo.
Monsieur Destouches -
Besos.
Paco -
ange sans ailes -
Suerte.
Que ese diosecillo tuyo siga bendiciéndote cada noche con su susurro.
KENDRA -
Tartufo taperware -
Ambas cosas supongo.
Un abracito, hermano.
odyseo -
Magnífico post!!